El cambio generacional en empresas familiares garantiza la continuidad del negocio mientras se mantiene la estructura de empresa familiar. Existen algunos retos y dificultades para afrontar este cambio, ¡te damos las claves para hacerlo con éxito!
Fortalezas y debilidades en empresas familiares:
Una de las principales fortalezas de la empresa familiar es, sin duda, la pasión del líder por la misión de la empresa y su empeño en que perdure.
Otras fortalezas de las empresas familiares es la cercanía entre los miembros del equipo de trabajo, su consolidación en el mercado y su flexibilidad.
Por otra parte, la carencia de sucesores del negocio o la falta de formación de los mismos compromete gravemente la continuidad de la empresa familiar.
Otras debilidades de este modelo son la falta de claridad en el organigrama empresarial, los conflictos familiares que afectan a la actividad o la tendencia a resolver las cosas “en casa”: es común que en las empresas familiares no se busque en el mercado una solución de financiación o un recurso humano ajeno a la familia.
Problemas de sucesión en las empresas familiares:
¿Cuáles son los principales retos del cambio generacional en empresas familiares? Estos son las dificultades más habituales:
- La decisión del nombramiento del nuevo líder o director se toma muchas veces atendiendo a razones más relacionadas con asuntos familiares/emocionales que con el talento del candidato, debido a la confusión de los roles familiares y empresariales.
- La falta de planificación, debida a veces a la necesidad emocional que experimenta el líder de retrasar el momento de “pasar el testigo”, evitando tomar decisiones con la anticipación necesaria.
- Problemas fiscales relacionados con la sucesión y/o problemas de herencias.
- La resistencia al cambio, la tendencia del líder a mantener patrones conocidos para no perder el control.
- La falta de liderazgo del sucesor, relacionada muchas veces con la carencia de planificación: no se estimula ni forma el desarrollo del liderazgo de los sucesores.
Todos estos problemas de sucesión generan costes empresariales y debilitan la empresa, poniendo en peligro la continuidad del negocio. De hecho, un aplastante 70% de empresas familiares fracasan en el primer cambio generacional. ¿Qué hacer? ¿Cómo plantear entonces la sucesión generacional para lograr el éxito del proceso?
Consejos para el cambio generacional en empresas familiares
Lo primero a tener en cuenta es la necesidad de preparar el cambio con antelación suficiente. Es necesario planificar de forma expresa los plazos y fases en los que el cambio irá desarrollándose.
Para organizar la sucesión de la empresa familiar es imprescindible crear un protocolo que recoja de forma clara los acuerdos a nivel familiar, empresarial y patrimonial, así como las relaciones entre la empresa y los miembros de la familia. ¿Serán empleados, accionistas, miembros del consejo de administración?.
Esta es quizá la parte más difícil. Este proceso puede costar arduas negociaciones y mucho tiempo. Sin embargo, con asesoramiento profesional por parte de un experto ajeno a la compañía, se verá simplificado significativamente.
¿Quién será el nuevo líder? Es importante que tenga formación y experiencia para poder desarrollar el puesto, y también para que tengan fe en él y pueda ejercer su liderazgo.
No se debe confundir poder con autoridad. El nuevo líder obtiene el primero de forma rápida, mientras que lo segundo tardará en llegar. En algunos casos, es aconsejable que el líder anterior asesore al nuevo líder durante las primeras fases, aunque debe redirigir hacia él cualquier consulta que reciba de otras personas relacionadas con la empresa.
Junto con la planificación, la buena comunicación es otra de las claves. Es importante potenciar la comunicación clara y la neutralidad, impidiendo que los conflictos familiares afecten el clima laboral.
No podemos dejar de mencionar el papel que juega la tecnología en la regeneración de las empresas familiares. Adaptarse a nuevos retos es abrazar cambios importantes, también en lo que se refiere a la digitalización de la empresa.
Como conclusión, durante el proceso de cambio generacional en empresas familiares, es necesario planificar, aplicar puntos de vista racionales y profesionales, y las mejores prácticas de comunicación para conseguir que este culmine con éxito.